La regla general es: muchos alimentos y bebidas de origen vegetal, moderación en los alimentos de origen animal y mucha moderación en los alimentos ricos en grasas y los dulces.
Como otra regla empírica, puedes recordar que los niños necesitan unas cinco comidas debido al crecimiento y al ejercicio: Desayuno, merienda (como un almuerzo para llevar), comida, tentempié (como fruta) y cena.
Cree un ambiente agradable, coman juntos y deje que los niños opinen y ayuden en la compra y la preparación.
Una dieta sana y equilibrada es importante para el desarrollo y la salud de los niños. Pero con tanta oferta de alimentos, no es tan fácil decidir qué alimentos son buenos para los niños.
[button]Recetarios para una dieta infantil equilibrada[/button].
Índice de contenidos
1. reglas generales para una alimentación infantil sana
El Sistema Bávaro de Información al Consumidor ha elaborado tres reglas para una alimentación infantil sana. Éstas recomiendan

- Abundancia de alimentos y bebidas de origen vegetal
- Alimentos de origen animal moderados
- Pocos alimentos ricos en grasas y dulces.
En concreto, esto significa que un niño necesita aproximadamente:
- 6 raciones de bebida
- 5 raciones de fruta, verdura, ensalada o verduras crudas
- 4 raciones de pan, cereales y guarniciones
- 3 raciones de productos lácteos
- 1 ración de carne, pescado, huevo o embutido
- 2 raciones pequeñas de grasa para cocinar o untar
- 1 ración de dulces
Utilice su propia mano o la de su hijo para medir una ración. De este modo, las raciones crecen con la edad del niño.
2. 5 comidas infantiles al día

Como otra regla general, los padres pueden recordar que los niños necesitan unas cinco comidas repartidas a lo largo del día debido a su crecimiento y a que hacen mucho ejercicio: desayuno, un tentempié (como la merienda del recreo), comida, merienda y cena.
Los denominados alimentos infantiles, dirigidos específicamente al gusto de los niños, no son automáticamente componentes saludables de la dieta. Las promesas saludables, como una porción saludable de leche en el chocolate para niños o vitaminas extra en el zumo de frutas, no son garantía de buena nutrición y deben ser cuestionadas por los padres. Según un informe de la organización Foodwatch, estos productos suelen tener un contenido especialmente alto de azúcar o grasa, por lo que entran en la categoría de «dulces».
3. esto hace que comer sea divertido
Los niños también tienen sus propios gustos y los padres deben tenerlo en cuenta. Los padres pueden enseñar a sus hijos normas y establecer límites a la hora de comer y, al mismo tiempo, hacerles partícipes de las decisiones y dejarles opinar sobre su propia dieta. Ayuda en este sentido:
- Un ambiente agradable a la hora de comer
- Si se permite a los niños opinar y ayudar en la compra y preparación de la comida.
- Cuando los niños no siempre tienen que comer de todo
- Comer juntos
- Alternativas en lugar de prohibiciones.
Encontrará más información en la página del Sistema Bávaro de Información al Consumidor.