- La osteopatía pertenece al campo de la medicina alternativa.
- Se supone que la tensión y el dolor articular se alivian con un suave apretón de manos.
- Hasta ahora, sólo hay estudios insuficientes sobre la eficacia y el impacto de la osteopatía.
Desde hace algunos años, un método curativo alternativo en particular es el centro de atención de los medios de comunicación: la osteopatía. Sin embargo, este método tiene poco que ver con la imposición esotérica de manos, sino que trabaja en la interfaz entre la ortopedia, la quiropráctica y la fisioterapia. Al ser una aplicación especialmente suave, está especialmente indicada para recién nacidos y bebés. Por ello, muchos padres jóvenes consultan a un osteópata para una amplia gama de dolencias, como llanto constante, cólicos y flatulencias dolorosas, hasta problemas posturales , a menudo siguiendo el consejo de la comadrona .
El título profesional de osteópata no está protegido y la ciencia también se muestra escéptica ante este método alternativo de tratamiento, ya que faltan conocimientos y pruebas relevantes sobre su modo de acción. Por otro lado, la experiencia de muchos padres ha sido extremadamente positiva.
En este artículo, te informaremos sobre el tratamiento osteopático en general, así como para bebés, y te daremos consejos importantes sobre lo que debes tener en cuenta a la hora de elegir un osteópata.
Índice de contenidos
1. osteopatía – ¿qué es en realidad?
Desarrollada por el médico estadounidense Andrew Taylor Still en el siglo XIX, la osteopatía ofrece un enfoque holístico del cuerpo. A diferencia de la medicina tradicional, considera el cuerpo como una unidad funcional capaz de autocurarse con la ayuda de funciones corporales equilibradas.
Mediante diversos movimientos de las manos, los osteópatas detectan tensiones, problemas posturales y articulares, así como constricciones de los órganos, que se alivian mediante presiones suaves y posturas especiales. Estas molestias, que afectan tanto a niños como a adultos, se denominan bloqueos. Según esta teoría, son la causa de una gran variedad de problemas de salud, de los que se quejan sobre todo los padres con bebés pequeños:
- Problemas de sueño
- Cólicos y dolores abdominales
- Llanto frecuente y prolongado
- Problemas con la lactancia materna
- Sobreextensión de la cabeza y problemas posturales en general
- Regurgitación o síndrome de reflujo
La medicina convencional no suele encontrar una solución y aborda las dolencias de forma sintomática.
Básicamente, existen tres ámbitos de aplicación, que se orientan hacia las estructuras anatómicas del cuerpo:
osteopatía parietal | osteopatía visceral | osteopatía craneosacral |
---|---|---|
examina los músculos, el tejido conjuntivo, las articulaciones y los huesos | Examina los órganos y su incrustación tisular | Examina la cabeza y las vértebras cervicales, rastrea los ritmos propios del cuerpo Atención: ¡muy controvertida incluso dentro de la disciplina! |
Porcierto: el osteópata no prescribe ningún medicamento, sino que utiliza únicamente sus manos para corregir determinados trastornos del movimiento.
1.1 ¿Cuándo puedo empezar a ver a un osteópata con un recién nacido?
.
Dado que la demanda de citas con un osteópata ha aumentado rápidamente en los últimos años, algunas mujeres ya se ocupan de ello durante el embarazo y algunas clínicas ya ofrecen una revisión osteopática además de los exámenes habituales del recién nacido.
En principio, los médicos naturópatas especializados en el tratamiento osteopático de bebés aconsejan no esperar demasiado antes de presentarse. Puedes llevar a tu bebé a un osteópata a partir del segundo y tercer mes, sobre todo si el niño sufre las molestias ya mencionadas o, por ejemplo, sólo puede girar la cabeza hacia un lado o tiene deformidades craneales. Éstas se deben sobre todo a la posición unilateral del bebé en decúbito supino y suelen crecer solas con el tiempo.
Sin embargo, si tienes la impresión de que tu pequeño llora mucho, tiene problemas para dormirse o duerme muy mal y regurgita mucho, puedes comentarlo con tu pediatra y/o matrona y preguntar por los osteópatas adecuados. El pediatra te dará una remisión y una recomendación informal para la osteopatía, que podrás presentar a tu caja de enfermedad.
Desde que la Techniker Krankenkasse (TK) fue pionera en cubrir los costes de los tratamientos osteopáticos para niños, muchos otros seguros de enfermedad obligatorios, como la AOK o Barmer, también ofrecen ahora un reembolso total o parcial. Por lo general, no es necesario un seguro adicional. En la mayoría de los casos, los seguros de enfermedad privados cubren íntegramente los gastos ocasionados.
1.2 Las causas de las obstrucciones suelen surgir durante el parto
.
Tal vez te preguntes por qué un recién nacido ya muestra anomalías posturales a pesar de que sólo lleva unas semanas en el mundo. Pues bien, el parto no sólo es un proceso agotador y que consume mucha energía para la madre, sino también para el niño.
Cuanto más crece el niño en el útero, menos espacio hay disponible para él. El canal del parto, en el que el niño suele permanecer constreñido durante muchas horas, y el uso de fórceps o ventosa también pueden provocar desalineaciones de las vértebras cervicales. Incluso una cesárea concebiblemente no problemática conduce a menudo a una hiperextensión de la cabeza y el cuello después del parto, porque la limitación por la pared abdominal desaparece de repente. El llamado síndrome KiSS ( trastorno desimetríainducido por la articulaciónde altas cervicales) también puede remediarse con esta terapia manual.
En muchos casos, por tanto, la matrona suele llamar su atención sobre la posibilidad de un examen osteopático y recomendarle un especialista.
Atención:no todos los osteópatas están formados en el tratamiento de recién nacidos, por lo que siempre debes preguntar al terapeuta tratante sobre su formación.
1.3 ¿Cómo es el tratamiento?
El tratamiento de un bebé es especialmente delicado y cuidadoso, ya que muchos huesos y articulaciones son todavía muy blandos y flexibles. Como ocurre con la fisioterapia, es posible que los síntomas empeoren un poco antes de mejorar. También es perfectamente normal que su pequeño se sienta cansado después del tratamiento.
Como la mayoría de los padres también buscan el apoyo del osteópata debido a la inquietud constante del niño, en realidad su bebé ya no debería sentirse inquieto después, sino equilibrado en el verdadero sentido de la palabra. El tratamiento puede durar varias visitas, dependiendo de los síntomas y de la gravedad de las molestias.
2. el método suave también conlleva riesgos
Si se leen las aportaciones de los padres en los foros de Internet, la mayoría de ellos hablan con entusiasmo de la eficacia del tratamiento osteopático y recomiendan sin reservas este método curativo alternativo. Sin embargo, también hay que ser consciente de los riesgos de la osteopatía, que se deben principalmente a la falta de transparencia de la formación y a la desprotección del título profesional.
Dado que la osteopatía (todavía) no es una práctica reconocida, prácticamente cualquier médico alternativo, ortopedista, fisioterapeuta o médico alternativo puede llamarse a sí mismo osteópata sin haber completado la formación necesaria de cinco años con especialización adicional. Los cursos acelerados en otros países europeos también hacen que muchos médicos clásicos desconfíen fundamentalmente del tratamiento osteopático. Especialmente la osteopatía craneosacral, que se ha desarrollado posteriormente, tiende a adentrarse en el ámbito esotérico y suscita escepticismo incluso dentro de la disciplina.
Sin embargo, dado que el tratamiento no es invasivo y es más suave que intensivo, los riesgos para la salud de los adultos son limitados. En el peor de los casos, los síntomas no mejoran. Con los niños pequeños, sin embargo, la situación es diferente, ya que los movimientos manuales aplicados incorrectamente pueden causar daños posturales y lesiones en músculos, articulaciones y vértebras.
Por lo tanto, preste siempre atención a la formación del terapeuta e infórmese a fondo sobre el osteópata elegido con su pediatra o matrona. Además, puede consultar las asociaciones profesionales de osteópatas y buscar un terapeuta adecuado.
3. tratamiento osteopático para bebés: ¿sí o no?
Básicamente, el alivio suave de la tensión y los problemas posturales existentes tiene sentido y además es muy útil en la mayoría de los casos. La osteopatía también puede suponer una mejora para los bebés en el caso de dolencias más orgánicas, como flatulencias o reflujo. Por supuesto, esto sólo es válido siempre que lo lleve a cabo un terapeuta experimentado y especializado. Tras una anamnesis exhaustiva, el terapeuta también le indicará si las molestias pueden necesitar atención médica adicional o no son adecuadas para el tratamiento osteopático.