Un pelo sano es muy importante para los niños. Los padres deben actuar con rapidez en caso de enfermedades capilares.
Sin embargo, la carencia de nutrientes, los agentes patógenos y otras causas pueden provocar la caída del cabello en los niños. En este caso, es necesaria una terapia específica para proteger al niño de graves problemas psicológicos.
En esta guía, aprenderá qué puede hacer cuando su hijo pierde pelo y qué medidas ayudan rápidamente.
[La caída del cabello suele referirse a la pérdida excesiva de pelo en la cabeza. También puede afectar a los niños, que la sufren aún más en comparación con los adultos. En los bebés, la caída del cabello puede ser completamente normal, por ejemplo, porque permanecen demasiado tiempo tumbados sobre una parte de la cabeza. Sin embargo, si la caída del cabello se produce cuando ya ha empezado el crecimiento permanente del pelo, es esencial encontrar la causa.
A modo de clasificación aproximada, pueden distinguirse las siguientes formas de caída del cabello:
- Pérdida de cabello circunscrita, que se limita a una zona concreta,
- caída generalizada o difusa, que se produce en toda la cabeza,
- caída cicatricial y
- no cicatricial.
Índice de contenidos
Formas de tratamiento de la caída del cabello en niños
La caída del cabello suele ser un shock para los niños y sus padres. Las reacciones del entorno lo empeoran aún más. Por ello, es especialmente importante acompañar emocionalmente a los niños durante la terapia. Es importante que el niño entienda que la caída del cabello no es el fin del mundo. Los niños deben sentirse guapos y valiosos aunque se les caiga el pelo.
Si los niños y adolescentes se ven afectados por la caída del cabello, los padres deben abstenerse de autoexperimentarse y pedir consejo a un médico lo antes posible. Para que el tratamiento funcione, es necesario conocer la causa. Además, las posibilidades de curación son mucho mayores si el tratamiento correcto se inicia muy pronto. En este caso, la persona de contacto adecuada es el médico de familia, el dermatólogo, el pediatra o un especialista capilar.
Los especialistas capilares con experiencia se ocupan exclusivamente de la caída del cabello y sus causas. Por ejemplo, en el artículo del especialista capilar Reza P. Azar encontrará información de fondo, formas y ayuda para tratar determinadas formas de caída del cabello, así como consejos para su prevención.
Consejo: ¡preste atención a su dieta!
Una dieta sana es importante para un cabello sano. Demasiado azúcar y alimentos muy procesados industrialmente no son buenos para el pelo. En cambio, la fruta fresca, las bayas, las verduras, los frutos secos y los aguacates garantizan un cabello sano.
Para evitar la caída del cabello, un cuidado adecuado también es un punto esencial. Hay que peinarse con cuidado para no dañar el cuero cabelludo ni las raíces. También se puede estimular un poco el crecimiento del cabello con un masaje del cuero cabelludo, que se realiza con un aceite de alta calidad al que se añade aceite esencial de lavanda, madera de cedro o tomillo. Esto relaja y estimula. El champú suave no debe contener irritantes ni aditivos químicos.
El trasplante capilar como forma de terapia para niños se realiza muy raramente. En el caso de los niños, suele ser más eficaz tratar la enfermedad subyacente y estimular de nuevo el crecimiento del cabello con tratamientos regenerativos. Dado que las enfermedades mentales también pueden ser la causa de la caída del cabello, en algunos casos debe consultarse a un especialista adecuado.
Los principales problemas que pueden provocar la caída del cabello son, además de los motivos ya mencionados, los siguientes:
- Carencia de nutrientes: hay falta de hierro, zinc, selenio o vitaminas. Esto puede detectarse fácilmente mediante un hemograma.
- Disfunción tiroidea
- Patógenos
- Caída del cabello autoprovocada
Patógenos que pueden provocar la caída del cabello en los niños
Las bacterias, los hongos y los virus también pueden provocar la caída del cabello. La causa más común son las infecciones fúngicas del cuero cabelludo. Provocan una forma escamosa e inflamatoria de caída difusa del cabello. La forma más común es la tiña capitis, provocada por el hongo trichohyton. En esta dermatomicosis se forman regiones anulares rodeadas de escamas. También pueden verse afectadas las pestañas y las cejas. El hongo invade la superficie del cuero cabelludo y ataca el tallo piloso. Un frotis y un posterior cultivo celular proporcionan información sobre el tipo exacto de hongo. En la mayoría de los casos, se trata de un hongo Trichophyton o Microsporum.
¡Importante para los niños de guardería y jardín de infancia!
Estas enfermedades pueden ser contagiosas y propagarse muy rápidamente en el jardín de infancia o la guardería. Por ello, los niños no deben compartir gorros, cepillos o almohadas con otros niños.
Como terapia existen medicamentos especiales, los llamados antimicóticos. Primero se aplican localmente en forma de pomada. Si esto no surte efecto, es necesaria una medicación sistémica. Hay que tener en cuenta la edad del niño. Algunos medicamentos no son adecuados para los niños.
Alopecia areata – caída circular del cabello en niños
La alopecia areata se caracteriza por la caída circular del cabello. La padecen entre el 0,03% y el 0,1% de los niños, y afecta por igual a niños y niñas. Esta enfermedad aparece muy repentinamente. La caída del cabello es sin escamas y no cicatricial. La enfermedad subyacente es una enfermedad autoinmune, en la que el propio sistema inmunitario del organismo se dirige contra su propio cuerpo. En este caso, sólo se dirige contra las raíces del pelo. Considera que las raíces del pelo son extrañas al cuerpo y tiene que luchar contra ellas. Esto provoca reacciones inflamatorias que causan la caída del cabello.
No está del todo claro por qué no se ve afectada toda la cabeza. Esta enfermedad está determinada genéticamente y puede brotar una y otra vez. También puede provocar la caída permanente del cabello. El 30% de los pacientes presentan al mismo tiempo alteraciones en las uñas. Si esta enfermedad aparece en la edad escolar primaria, puede dar lugar a graves problemas de pertenencia a grupos y conflictos de identidad.
Caída del cabello autoinducida
Este tipo de caída del cabello es psicológica. Los afectados provocan ellos mismos la caída del cabello. Es más frecuente durante la pubertad y la adolescencia. En la tricotilomanía, los pacientes se arrancan ellos mismos el pelo. Se arrancan , tiran, frotan y retuercen el pelo. En los niños, este trastorno se da con más frecuencia en la infancia, mientras que las niñas suelen verse afectadas durante la pubertad. El resultado son zonas no delimitadas de pelo arrancado o roto de longitud variable. Una prueba de desplume en la consulta del médico suele ser negativa.
Un examen microscópico mostrará sangrado en la piel. Entre las causas se encuentran el estrés, la ansiedad, la pérdida de un cuidador importante o el divorcio.
La trictemnomanía es otra forma de caída del cabello autoinducida. En este caso, los pacientes se cortan ellos mismos el pelo.
La alopecia por tracción afecta sobre todo a niños que siempre llevan el pelo recogido en una coleta. La tracción sobre la parte delantera del cabello desencadena la caída del pelo en la línea de implantación frontal. Otras irritaciones mecánicas pueden ser peinar el pelo con demasiada fuerza o trenzarlo con fuerza. Los champús o los secadores calientes también favorecen este tipo de caída del cabello.
Caída cicatricial del cabello en niños
La caída del cabello cicatricial suele deberse a una infección fúngica profunda. Las enfermedades cutáneas ampollosas como la epidermólisis ampollosa o el liquen ruber folicular también pueden ser la causa. Del mismo modo, los trastornos inmunitarios pueden provocar una forma cicatricial de caída del cabello, como el lupus eritematoso.
Qué pueden hacer los padres
Hay mucha diferencia entre la caída del cabello «normal» y la que necesita tratamiento. En cifras, esto significa
Los niños que pierden entre 50 y 70 cabellos al día no sufren caída del cabello. Según los pediatras, este valor es bastante «normal». Mientras el pelo no se caiga a mechones, no se formen inflamaciones o calvas en la cabeza, no hay motivo de preocupación. Aunque el aumento de la caída del cabello sólo dure dos o tres meses, en la práctica no se asume que la pérdida de cabello esté relacionada con una enfermedad.
Los padres deben vigilar el cabello de sus hijos, así como su dieta y su comportamiento. De este modo, se puede saber rápidamente si la selección de vitaminas no es buena para el cabello o si un comportamiento patológico está causando la caída. El paso de la infancia a la pubertad, que va acompañado de una confusión hormonal en el organismo del niño, también puede desencadenar un cambio en la estructura del cabello.