El derecho a una educación no violenta: significado y consejos para los padres

En Alemania,la ley garantizauna educación no violenta. De hecho, los padres ya no pueden pegar a sus hijos. Pero, ¿cómo esen realidad? ¿Por qué es tan problemática la violencia en la crianza? En nuestro artículo …

El derecho a una educación no violenta: significado y consejos para los padres

Kinderrechte
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¿Sigue habiendo violencia en la educación?

Aunque hoy en día la mayoría de la gente acepta que todos los niños tienen derecho a una educación no violenta, por desgracia sigue habiendo padres que castigan físicamente a sus hijos.

¿Qué se considera violencia en la crianza?

No sólo el castigo corporal se considera violencia en la crianza. Exponer al niño o la violencia verbal también son absolutamente tabú.

¿Qué les hace la violencia a los niños?

Una educación violenta tiene efectos inmensos en la psique del niño y puede afectarle toda la vida.

En Alemania,la ley garantizauna educación no violenta. De hecho, los padres ya no pueden pegar a sus hijos. Pero, ¿cómo esen realidad? ¿Por qué es tan problemática la violencia en la crianza?

En nuestro artículo queremos describir brevemente la situación legal y explicar por qué criar a los hijos sin violencia física también es más fácil para los padres.
Además, profundizaremos en qué opciones tienes si las personas de tu entorno no respetan el derecho a una crianza sin violencia.

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1. todo niño tiene derecho a una educación no violenta

Aufgeschlagenes Gesetzbuch
Desde el año 2000, el derecho a una educación no violenta está recogido en la legislación alemana
.

La violencia contra los niños en el contexto de la educación está prohibida por ley desde el año 2000. La normativa correspondiente se encuentra en
§1631 BGB (Código Civil alemán). En concreto, la disposición del BGB no se dirige únicamente al caso clásico en que los padres pegan a sus hijos. Más bien, los derechos del niño abarcan los tres ámbitos siguientes:

  • castigo físico
  • maltrato psíquico
  • otras medidas degradantes

Aunque la mayoría de la población rechaza la violencia contra los niños, numerosos estudios demuestran que una educación completamente no violenta dista mucho de ser la norma.
Si hay reacciones desafiantes y conflictos en la familia, suelen acabar con violencia física.
En muchos casos, basta con una bofetada en el trasero. Sin embargo, incluso esta medida provoca un cambio en la relación entre padres e hijos.

2. la violencia no es una solución

Elternteil schlägt Kind
Golpear no resuelve los problemas.

La vida con hijos no siempre es fácil. De vez en cuando, todos los padres llegan a sus límites. Sin embargo, quienes tienden a ser agresivos en situaciones extremas y la toman con sus hijos sólo empeoran la situación.

El vínculo más importante entre padres e hijos es una base compartida de confianza. Incluso un solo golpe, una bofetada o una palmada en el trasero pueden romper este vínculo invisible.

Para los niños pequeños, el mundo sigue siendo blanco o negro. Una gran alegría se disuelve rápidamente en el aire si algo no sale como deseaban. Al entusiasmo alegre le sigue una regañina o una rabieta.
Aunque esto pueda resultar extremadamente agotador y tus nervios no sean igual de fuertes todos los días, siempre debes intentar ayudar a tu hijo con palabras.

Consejo: actúa con coherencia. Así es como los niños aprenden a valorar tu comportamiento. Por regla general, las rabietas suelen terminar por sí solas al cabo de unos minutos.

3. la educación no violenta se aplica de forma global

Ciertamente, hay muchos puntos de vista diferentes en el contexto de la educación de los hijos. Algunos padres consideran importantes unas normas claras y una estructura de poder definida, mientras que otros padres suelen rechazar los castigos y dan prioridad al libre desarrollo de la personalidad de sus hijos.

Independientemente del estilo de crianza que prefiera, la violencia no tiene cabida en la educación de los hijos. De hecho, incluso una bofetada en las nalgas cuenta como daño corporal en el sentido del artículo 223 del Código Penal y podría ser perseguido.

Sin embargo, no sólo están prohibidos los azotes que afectan directamente a la salud de tu hijo, sino también cualquier medida que pueda causar daños psicológicos.

Kind im Karton
La psique de un niño es frágil
.

En la práctica, por supuesto, esto no significa que tengas que dejar que tu hijo se salga con la suya en todo. Al contrario, unos límites y normas claros son importantes para dar a los niños cierta estructura.
Sin embargo, las siguientes medidas no son compatibles con una crianza no violenta:

  • Ridiculizar delante de otros (ya sea delante de niños o de adultos).
  • Intimidar amenazando con violencia física.
  • Faltar al respeto a los niños («no vales nada», «de todas formas no lo conseguirás», «si nunca te hubiera tenido» son frases que ningún niño debería oír).
  • Dejar a los niños solos en casa (sin supervisión, negligencia)
  • Explotar la indefensión del niño
  • Utilizar a los niños para los propios intereses (a menudo como juguete en parejas separadas)

Por desgracia, la violencia psicológica es muy difícil de comprender, pero también deja numerosas cicatrices en el alma del niño.

4 Lo que la violencia hace a la infancia

Kind bei einer Psychologin
Las víctimas de la violencia suelen depender de ayuda terapéutica
.

Los niños que entran en contacto con la violencia física o la negligencia emocional a una edad temprana suelen sufrir no sólo en la infancia, sino que también tienen dificultades para entablar otras relaciones a lo largo de su vida posterior.

Al principio, muchos niños reaccionan con sentimientos de culpa, ya que se sienten responsables del arrebato violento de sus padres. Automáticamente, su autoestima se resiente. Algunos niños se retraen fuertemente, mientras que otros reaccionan con ira y agresividad.

Otros niños son golpeados porque los padres están acostumbrados a imponerse con violencia desde casa. La inquietud interior, los problemas para dormir o mojar la cama en la edad de la escuela primaria son sólo algunas de las formas en que puede desencadenarse la violencia física y psicológica.Desgraciadamente, los resultados de las investigaciones demuestran una y otra vez que, especialmente los padres que sufrieron ellos mismos la violencia cuando eran niños, recurren más a la violencia en la crianza.

Si se pisotea la protección de la infancia y ya no se trata sólo de una bofetada ocasional, sino de un maltrato sistemático durante muchos años, una vida normal es casi impensable.
Los afectados suelen hablar de sus traumáticas experiencias infantiles en el contexto de muchos años de psicoterapia.

Atención: Si reconoces signos de violencia en un niño de la guardería o la escuela, no dudes en llamar a las autoridades públicas. Los niños en situación de riesgo dependen de la ayuda exterior, ya que ningún niño es capaz de liberarse por sí mismo.

5. consejos para una educación sin violencia

Mann steht mit einem Gürtel in der Hand vor einem Kind
Detente antes de pegar la próxima vez.

Aunque las experiencias de cada uno moldean a cada persona y la convierten en quien es hoy, siempre hay formas de trabajar sobre uno mismo. Si se te ha ido la mano una vez, esto no significa en absoluto el fin de la relación con tu hijo.
Sin embargo, de ti depende cómo afrontes las situaciones difíciles en el futuro y si consigues centrarte en una crianza no violenta a partir de ahora.

Cuestiónate a ti mismo y a tu comportamiento para darte cuenta de que la violencia no es una solución. Las siguientes preguntas deberían ayudarte a descubrir cuál es realmente el problema que se esconde tras la violencia:

  • ¿Por qué pego? ¿En qué momentos reacciono con especial dureza?
  • ¿Es mi hijo especialmente difícil? ¿Y pegar resuelve el problema?
  • ¿Me siento culpable después de un estallido de violencia?

Todo el mundo se siente desbordado de vez en cuando y no hay por qué avergonzarse de reconocerlo. Sin embargo, no te permitas descargar estos sentimientos en tu hijo.
En lugar de eso, busque ayuda profesional. Existen numerosos contactos a los que puede acudir sin ser juzgado.
Aquí puedes buscar directamente los centros de asesoramiento de la Agencia de Protección de la Infancia de tu zona.

Consejo: Hablar y escuchar activamente son la clave de la comunicación. Muéstrale a tu hijo si un comportamiento te ha hecho daño, pero mantente ecuánime e intenta comprender su punto de vista.

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