- Debido al todavía débil sistema inmunitario de los bebés, la bronquitis puede causar síntomas graves.
- No todos los niños presentan los mismos síntomas. Algunos reaccionan con aumento de la temperatura o fiebre, otros no tienen apetito.
- Si su bebé parece no tener apetito o tiene el pañal notablemente seco, debe consultar a un médico.
La bronquitis en un bebé se produce con especial frecuencia entre los 2 y los 6 meses. Las vías respiratorias del bebé aún no han desarrollado un sistema de defensa completo y, por tanto, son más susceptibles a las infecciones. La enfermedad suele aparecer en los meses más fríos del invierno o en primavera, cuando aún no hace mucho calor. En nuestra guía, te presentamos los síntomas de la bronquitis del lactante y te explicamos qué ayuda a tratarla.
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¿Qué es la bronquitis del lactante?
La bronquitis es una inflamación de las mucosas bronquiales. Suele aparecer en los meses de invierno, cuando hace frío y hay humedad en el exterior. La bronquitis puede estar provocada por virus o bacterias. Los niños pequeños y los bebés suelen contraer bronquitis en forma de infección vírica.
Los bebés y los niños pequeños suelen padecer enfermedades respiratorias como la bronquitis porque el sistema inmunitario del bebé no está completamente desarrollado en el primer año de vida. A medida que los niños crecen, su sistema inmunitario también es más robusto y las enfermedades bronquiales deberían ser menos frecuentes. Debido a la debilidad de las defensas del bebé, la bronquitis puede ser peligrosa. Por regla general, los síntomas duran hasta dos semanas; una bronquitis grave puede durar hasta cuatro semanas.
2. síntomas de la bronquitis
La bronquitis del bebécomienza con los síntomas típicos del resfriado, como secreción nasal, fiebre y tos leve. Al cabo de unos días, el bebé puede tener cada vez más dificultad para respirar y la tos puede agravarse. Al principio, la tos es seca y aún no es mucosa; sólo más tarde empieza a formarse la mucosidad.
Como consecuencia de la bronquitis, el estado general del bebé empeora, suele perder el apetito y le resulta difícil comer.
Los bebés y niños pequeños suelen padecer bronquitis obstructiva en los tres primeros años de vida. Esta enfermedad está provocada por virus y puede hacer que el bebé tenga dificultades para respirar. Un síntoma típico de la bronquitis obstructiva es un silbido o traqueteo al espirar.
Las dificultades respiratorias pueden provocar falta de aire. Un signo de falta de aire en el bebé puede observarse en las fosas nasales cuando se mueven visiblemente con la inspiración y la espiración, aleteando por así decirlo. En raras ocasiones, las mucosas, los labios, las manos o los pies pueden ponerse ligeramente azules debido a la falta de aire. Esto puede poner en peligro la vida del bebé. Por eso, en estos casos, hay que consultar inmediatamente a un médico o a un hospital.
Es muy posible que el bebé tenga bronquitis sin fiebre. Dependiendo del niño y del tipo de bronquitis, pueden aparecer distintos síntomas. Mientras que algunos muestran un aumento de la temperatura o fiebre, otros bebés no tienen apetito.
3. ir al hospital o al médico
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Si hay ciertos signos, los padres deben consultar sin falta a un hospital o a un pediatra. Si notas que tu bebé respira con dificultad o incluso le falta el aire, debes buscar tratamiento médico inmediatamente. Si el bebé come y bebe menos de lo habitual o si el pañal está notablemente seco, también hay que consultar al médico.
Lo mismo ocurre si el estado general del bebé empeora y parece cada vez más aturdido. Se debe consultar a un médico para que pueda hacer un diagnóstico fiable e iniciar el tratamiento adecuado.
Al auscultar los pulmones, el médico ya puede determinar si el bebé tiene bronquitis u otra enfermedad.
Si el médico sospecha que puede tratarse de una bronquitis obstructiva, le hará una radiografía. En el caso de la bronquitis crónica, es decir, la bronquitis recurrente, también deben realizarse otros exámenes para llegar al fondo de la causa dela enfermedad.
Debe consultar a un médico:
- Si el bebé toma menos leche de lo habitual.
- Si el pañal permanece notablemente seco
- Si el bebé tiene dificultades para respirar
- Si el estado general del bebé empeora progresivamente.
- Si el bebé parece aletargado
4. tratamiento de la bronquitis: ¿qué ayuda?
En primer lugar, los bebés con bronquitis necesitan descansar mucho, deben dormir lo suficiente y beber suficientes líquidos para que la mucosa pueda regenerarse. Además, el médico le recetará medicamentos expectorantes, como expectorantes para la tos en forma de zumo, cápsulas o comprimidos efervescentes. El médico debe decidir si un antibiótico es útil. Sólo tiene sentido administrar antibióticos si la causa de la bronquitis es una bacteria.
4.1 Remedios caseros e inhalación
En muchos casos, los remedios caseros también pueden ayudar o al menos apoyar el proceso de curación. La inhalación es un método probado para la bronquitis. En lugar de inhalar sobre un cuenco de agua caliente, es más adecuado utilizar un inhalador. Un cuenco se considera ineficaz porque el niño retrocede intuitivamente ante el calor y, por tanto, la solución de inhalación no llega a los bronquios.
Además, existe el riesgo de que el niño se queme con el agua caliente o de que el vapor de agua caliente le irrite los ojos. Un inhalador de vapor tiene una boquilla especial. Esto permite que las gotas de vapor producidas por el dispositivo lleguen directamente y de forma selectiva a las vías respiratorias superiores. Una ventaja es que el agua caliente no puede salirse y escaldar al niño. Además, la inhalación se mantiene caliente durante mucho tiempo y ayuda a aflojar la mucosidad de los bronquios. Este inhalador de vapor puede adquirirse por 50 euros. Los bebés también pueden inhalar entre tres y diez minutos.
Consejo: para iniciar al bebé en la inhalación o distraerle durante ese breve periodo, puede ser útil contarle un cuento o ponerle un audiolibro.
Para la inhalación, muchos pediatras recomiendan una solución salina al 0,9 por ciento, disponible en farmacias. Esta solución salina está adaptada al contenido en sales del cuerpo humano y, por tanto, es especialmente adecuada. Los aceites esenciales pueden provocar irritaciones, especialmente en los bebés. Por este motivo, no deben utilizarse.
Atención: el aceite de menta o de eucalipto, en particular, se considera peligroso para los niños menores de un año, por lo que debe evitarse.
5. dar un paseo al aire libre
Cuando un bebé de 7 u 8 meses tiene bronquitis, los padres a menudo se sienten inseguros y se preguntan si pueden sacar al niño a pasear al aire libre. Sobre todo en los meses de invierno, cuando la calefacción de casa está permanentemente encendida, el aire seco puede irritar aún más las vías respiratorias.
Salir al aire fresco puede regenerar las mucosas y proporcionar alivio. Sin embargo, no se debe salir cuando las temperaturas son demasiado frías, es decir, muy bajo cero, porque el aire muy frío provoca la contracción de los bronquios. Esto puede tener un efecto negativo en el bienestar del bebé. El tiempo que pasees al aire libre con tu hijo dependerá de su estado general. En cualquier caso, tu hijo debe ir bien abrigado para que no pase frío.