La causa más común de las infecciones fúngicas en los niños es la levadura Candida albicans. Ésta ya se transmite de madre a hijo durante el embarazo o el parto. Los hongos filamentosos, por su parte, suelen transmitirse a través de animales domésticos infectados.
Las infecciones fúngicas pueden estar causadas por diferentes hongos. Los dermatofitos suelen causar anillos enrojecidos e inflamados en la piel, que van acompañados de picor intenso y piel seca y escamosa.
Los hongos que sólo son superficiales en la piel suelen poder tratarse con pomadas o tinturas antifúngicas. Si la infestación fúngica es muy persistente o está muy avanzada, puede ser necesario combatirla con medicamentos en forma de comprimidos.
La función de barrera de la piel aún no está completamente desarrollada en bebés y niños pequeños. Esto, unido a un sistema inmunitario aún en desarrollo, puede hacer que virus, bacterias y hongos penetren más fácilmente en la piel. En Alemania, aproximadamente uno de cada tres bebés padece hongos cutáneos.
En este artículo obtendrás información sobre cómo se desarrollan los hongos en la piel, qué síntomas aparecen en primer plano y qué tratamiento es posible. También te damos consejos sobre cómo prevenir los hongos en la piel de tu bebé.
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Índice de contenidos
1. la infección fúngica puede estar causada por levaduras u hongos filamentosos
Infección fúngica debida a una mala alimentación
Según un estudio, la infestación fúngica por la levadura Candida albicans también puede deberse a una mala alimentación. Especialmente el consumo excesivo de azúcar y harina blanca puede provocar la propagación del hongo en el organismo y en la piel.El hongo dela piel se denomina médicamente dermatomicosis. Básicamente, puede aparecer en cualquier parte del cuerpo. Mientras que algunos patógenos afectan principalmente a las mucosas de la boca, otros hongos afectan a la piel o a las uñas.
Las enfermedades fúngicas son mucho más frecuentes en niños que en adultos. Uno de los motivos es que la función de barrera de la piel aún no está completamente desarrollada, sobre todo en bebés y niños pequeños. Esto facilita que los agentes patógenos penetren en la piel. Además, el sistema inmunitario aún no funciona correctamente y no se puede luchar adecuadamente contra los patógenos.
Las infecciones fúngicas pueden estar causadas por diversos hongos. Si aparecen hongos cutáneos en el bebé, hay dos hongos que entran en consideración: los hongos levaduriformes o los dermatofitos (hongos filamentosos).
La levadura Candida albicans se da de forma natural en la piel de muchas personas. En principio, no causa ningún problema. Sólo causa problemas cuando se multiplica y se extiende por la piel. Durante el parto vaginal o la lactancia, el hongo puede transmitirse de la madre al bebé. A menudo se manifiesta como candidiasis bucal o candidiasis del pañal.
En cambio, loshongos filamentosos suelen transmitirse a través de animales domésticos como cobayas, conejos o gatos. Si un animal está infectado por un hongo filamentoso de este tipo, puede contagiarse rápidamente a la piel del bebé al abrazarlo y acariciarlo.
Una infección fúngica también puede estar causada por moho. En este caso, los problemas respiratorios son la principal preocupación. Sin embargo, las infecciones por moho son bastante raras en los niños.
Los síntomas más comunes son manchas rojas y escamosas en la piel.
Los síntomas de las infecciones cutáneas por hongos en los bebés dependen del agente patógeno que haya causado la infección. Sin embargo, por regla general, todos los hongos provocan cambios visuales en la piel. Éstas pueden afectar a distintas partes del cuerpo.
La tiña, por ejemplo, aparece en forma de pústulas circulares y enrojecidas en el abdomen y la espalda, así como en brazos y piernas. En estas zonas se produce un enrojecimiento redondeado y escamoso, acompañado de fuertes picores. Si el hongo del hilo ataca la cabeza, se produce la caída del cabello. Sin embargo, una infección por hongos filamentosos puede extenderse a la cara y el cuello, provocando que las zonas de piel afectadas se descamen y piquen.
En cambio, la levadura Candida albicans prefiere las zonas cálidas y húmedas del cuerpo. En los bebés, por ejemplo, puede aparecer en el culito, en la ingle o en la región genital. Se desarrollan grandes zonas enrojecidas con pequeñas pústulas y ampollas.
Consejo: Si aparece dolor o picor en un bebé, suele notarse por el hecho de que suele estar muy inquieto y llora más a menudo.
3. tratar los hongos de la piel con pomadas o medicamentos
.Si tu bebé presenta alguno de estos síntomas, no debes dudarlo mucho, sino consultar al médico cuanto antes. Si no haces nada, el hongo seguirá extendiéndose. De este modo, puede hacerse crónico y extenderse hacia el interior.
Dado que las infecciones por hongos son contagiosas, es importante lavar la ropa, las toallas y la ropa de cama al menos a 60 grados. Para evitar el contagio, no debes enviar a tu hijo al grupo de niños pequeños o a la guardería durante este tiempo.
Las infecciones por hongos suelen ser muy tratables. Los medicamentos que se recetan tienen muy pocos efectos secundarios y son muy bien tolerados por bebés y niños. Tras un examen exhaustivo, el médico decide qué antimicótico es el más adecuado. Para ello, toma una muestra de la zona inflamada de la piel y la examina en busca de los patógenos correspondientes.
Si la piel estáseca, suelen utilizarse pomadas o cremas. Si, por el contrario, la piel inflamada es exudativa, se aplica un polvo especial. Si la infección fúngica es más grave, puede ser necesario administrar comprimidos.
Es importante aplicar o tomar las pomadas o la medicación durante el tiempo que haya prescrito el médico. Esto se aplica incluso si los síntomas ya han remitido. Si el tratamiento se interrumpe demasiado pronto, puede producirse una recaída.
Precaución: El tratamiento con remedios caseros sencillos no es aconsejable para bebés y niños. Sin embargo, la infusión de manzanilla es útil como apoyo al tratamiento médico.
4. hongos en la piel de los bebés: así puedes prevenir una infección
Una infección por hongos puede convertirse en algo muy duradero y desagradable, por lo que debes tener cuidado para prevenirla. A continuación, queremos darte algunos consejos sobre cómo prevenir las infecciones por hongos en la piel de los bebés:
- Viste siempre a tu bebé con ropa permeable al aire para evitar un ambiente húmedo.
- Seca bien a tu bebé después del baño. De lo contrario, la humedad puede acumularse y provocar inflamaciones y llagas en la piel.
- Haz que un veterinario revise periódicamente a tus mascotas para detectar la presencia de hongos en la piel. Esto es especialmente cierto en el caso de gatos, conejos y cobayas.
- Cambia regularmente los pañales de tu bebé para evitar la humedad. Limpia siempre suavemente la piel entre pañales y sécala bien.
- Lava regularmente la piel de tu bebé con productos de baño suaves. A continuación, aplícale una loción corporal suave.
- Utiliza polvos de talco con moderación. Algunos bebés pueden ser alérgicos a sus ingredientes.
- En cuanto a la alimentación, asegúrate de evitar el azúcar y los alimentos dulces siempre que sea posible.
5. infusión de manzanilla como tratamiento de apoyo
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